viernes, 31 de octubre de 2008

Por Dios no me lo nombren, no lo puedo resistir. Su vida es de otra mujer y de esa mujer su reir. Es una larga historia, que arranqué , un cuento sin memoria que olvidé. Por Dios no me lo nombren, que me duele recordar ; por Dios no me lo nombre, que su nombre me hace mal. Vuelo hacia una tormenta que pasó el saldo de una cuenta que acabó. Lo olvidé,ustedes son testigos; lo olvidé, lo saben mis amigos. Por favor, les pido no se asombren y por Dios, por Dios que nadie me lo nombre.

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